Reconozco el pecado q vive en mi,
(original concebido)
como conmigo convive
la sangre q circula en mis venas.
Reconozco, las mil y una vez q he dicho
nunca, para terminar cayendo en la trampa
de las palabras q se devuelven.
(más de mil veces)
Reconozco, q a veces creo q me las sé
todas y q muchas veces no he sabido nada,
con el interés sublime de q el mundo,
Dios o el universo me regalen el privilegio
de verme sorprendido.
Reconozco, no ser el mejor amigo, porque,
mis propios defectos limitan el dar sin
limites, pero sé y estoy seguro q muchas
veces he podido reconocer la canción
q le aligeran sus cargas.
Reconozco q he cometido errores
de los cuales, en algún momento pude
aprender, pero también se q he sido lo
suficientemente testarudo como para
volver a cometerlos (sin arrepentimientos).
Reconozco, ser dueño absoluto de mis
defectos, algunos cargados a mi espalda
(ya sin peso) y algunos otros llevados como
trofeos ganados a pulso y lágrimas.
Reconozco, q no he tenido limites para
mis sueños, aunque muchos de ellos
han chocado contra paredes infranqueables.
Reconozco, q he amado y q amo;
q prefiero un te quiero en mitad
de una pelea, q seguir en ella dando
vueltas como un trompo.
Reconozco simplemente hoy:
q he pecado mucho de
pensamiento, palabra, obra
y omisión.
Y q no puedo prometer
no volver a pecar.
... como siempre fiel a las alas q llevo...
miércoles, 18 de noviembre de 2009
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