martes, 12 de mayo de 2009

Rumores

No fue un rumor sordo
de hojas secas,
fue una avalancha de bulla interminable,
llegaba desde más allá de los pinares,
de los faros solitarios alumbrando dormidos
a los mares agitados en sus sueños.

No fue un rumor de arañas tejiendo
en las paredes solitarias y raídas
de la casa vieja, donde habitan fantasmas.

No fue nada de lo q presagiaba
el destino en la ausencia de la razón,
fue el doloroso quejido del alma
al tratar de despojar en jirones
este amor sembrado en mí...

No hay comentarios: