Regálamelo con olor a nardos
apacible
perdurable
q perturbe
Con la suavidad de tus manos
cargado de verbos
y sabio como tu voz melodiosa
Dámelo con un horizonte lleno de colores
inocente y loco
hecho con confianza
no se resquebraja!
Q disfrute de la libertad de un pasado olvidado
sin extractos de llantos amargos o extraños
Q importe y duela suave
pero q se merezca un desvelo
Q me tome
y me absuelva sorprendentemente
me haga digno de un destino compartido
Con rostro y nombre
regálamelo
q ya creo empezar a extrañarlo…
martes, 21 de abril de 2009
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