Q fácil brotan de algunos labios,
frases con la intención de herir
como emerge del fango el mal olor
q la propia tierra no puede resistir.
Palabras q empequeñecen y queman
a quien las osa decir,
pues nacen de un alma rencorosa,
sórdida e infeliz,
donde no tiene cabida la alegría,
donde no se alberga el perdón
donde no habita la magia
y se percibe total ausencia
de humildad y comprensión.
Almas tristes y cansadas,
vacías de ilusión
q buscan en los demás
las culpas de sus fracasos y desilusión,
y no se dan cuenta , de q ése
es, precisamente,¡ su más grande error!...
viernes, 5 de diciembre de 2008
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